En la presentación oficial de los aviones F-16 en el Área Material Río Cuarto, Córdoba, el presidente aprovechó la ceremonia para defender al reemplazo de Petri.
Durante su discurso, Milei rechazó que el puesto deba ocuparse según rendimiento mediático y apuntó contra las críticas: “Nosotros no buscamos a los que mejor miden en cámara, sino a los que más saben”. También elogió la trayectoria de Presti en el Ejército y afirmó que posee una “integridad moral” que, según él, “muchos políticos desconocen”.

Del acto participó gran parte de la cúpula del Gobierno: Karina Milei, Manuel Adorni, Pablo Quirno, Alejandra Monteoliva, Luis Petri y autoridades de la Fuerza Aérea, encabezadas por el brigadier Gustavo Valverde. Tras los discursos, Milei volvió a meterse en el centro de la escena al subirse a uno de los F-16 recién presentados.
Las seis aeronaves que llegaron al país fueron adquiridas a Dinamarca y forman parte de un acuerdo por un total de 24 unidades, equipadas con sistemas de armas provistos por Estados Unidos. La operación demandó unos u$s650 millones y, según Defensa, los cazas fueron modernizados para alcanzar estándares de cuarta generación, con sensores avanzados e intercambio de datos en red.
Para cerrar, Milei presentó la compra como un símbolo de “la Argentina que se está construyendo”, un país —dijo— decidido a “recuperar protagonismo” internacional. Y fiel a su estilo, dejó su marca en el final: “Hoy más que nunca podemos decir que las fuerzas del cielo nos están acompañando. Viva la libertad, carajo”.
